8 apellidos catalanes
El sábado por la noche nos pusimos a verla. Con 8 apellidos vascos me lo pasé muy bien. Fuimos al cine y todo. Es cierto que se trata de típicos tópicos, pero en realidad son cosas que me gustan, me resultó muy divertida y hasta me emocioné con el final en el coche de caballos y Ecos del Rocío. Sangre andaluza que llevo y embarazada que iba, pues mira, una se emociona con estas cosas. Tenía ganas de ver la versión "nostra" desde que supe la iban a rodar.
Dicen
que las segundas partes son malas, y aunque no ha de ser siempre así, aquí
tenemos un gran ejemplo de ello. Mala no, malísima a mi gusto. Quizás si no la
pudiéramos comparar con la primera tendría mejor crítica, pero como es una
segunda parte con los mismos protagonistas, las comparaciones son obligatorias.
Dani
Rovira clava al chico andaluz. Clara Lago hace lo mismo con la vasca. Pero me
van a perdonar, Berto no representa ni de lejos a un típico chico catalán salvo
por el nombre. Es un tipo medio tonto, con poca o casi nada personalidad que ni
tiene sangre ni gracia. No digo que los catalanes sean graciosos (que ya
sabemos no lo son, o tienen un humor más tipo Eugeni jajaja) pero tienen su
punto, y no lo han sabido encontrar. Creo que un Joel Joan lo hubiera hecho genial,
más acertado. (y que me encanta este actor) Aun así, a mi Berto Romero también me encanta,
y no se trata de que sea malo él, para nada. Creo que más bien ha estado
desaprovechado. Berto tira más sin ese papel de pintor al que dan ganas de
tirarlo por el balcón por tonto y creído. ¿En serio una vasca como Amaia, con su caracter, se va
a casar con un tipo blandiblu como Pau? No me lo creo.
Rosa
Sarda sí me gustó, esa iaia catalana. Bueno es que en ella me gusta todo, dudo que alguna vez haga
algo mal esta mujer, jaja. No sé, la encuentro autentica y muy graciosa.
No soy
muy critica, pero sí voy a tener un par de detallitos criticables:
Nada
más empezar, he encontrado a faltar paisaje de Catalunya. En la primera, tanto
en Sevilla como en el país vasco, han sido más, BASTANTE más generosos con los
preciosos paisajes de ambos. Aquí te colocan el AVE y un campo de trigo,
eeemmmmm….¿¿¿????
Luego
los “españolitos” encondidos en un bar para que no molesten…..no comprendo muy
bien de donde ha salido ese “esquetx” o como se diga. No me cansaré de decir
que la convivencia es mucho más buena de
lo que se empeñan en mostrar (la gran parte de veces) y créanme que vivimos muy
civilizadamente juntos y revueltos,
independentistas y no-independentistas. Pero bueno, hemos venido a reírnos y a tomárlo con
humor, claro que sí.
Seguramente
podría haber sido una película más lograda si le hubieran dedicado más tiempo y
más cariño, creo que la idea era buena. Interponer a un catalán entre una vasca
y un andalú podía haber tenido mucha chicha….pero no, no tiene gracia, no te
ríes y no te engancha. Es entretenida pero no puedes esperar nada más de ella.
De
todas formas, no me hagáis mucho caso porque en realidad tampoco la acabé de
ver, Judit se despertó cuando Rafa se aventuraba
a hacer de casteller…..si cambio de opinión, lo contaré.
Nosotros también la vimos el sábado por la noche. Es verdad que me gustó más la primera. Reconozco que a Berto le podrían haber sacado más provecho, con Rosa María Sardá me pasa lo mismo que a ti, todo lo que hace me parece bueno y aquí está genial, lo mejor de la película.
ResponderEliminarImagino que la idea de la película es exagerar la situación, sino fíjate en no querer pisar Madrid y tener que llevarle a cuestas.... vamos ni que en Madrid comiéramos vascos.
Estoy contigo en el día a día no es para tanto como nos lo pintan los informativos y como quieren los políticos que nos llevemos.
De hecho estoy casado con una catalana.... jejejej con eso te lo digo todo.
Muchos besos desde Madrid
Sí, a caballito por Atocha. Desde luego.....jajajaja
ResponderEliminarNo sabía (o no recordaba si es que lo has mencionado en algún momento) que era catalana, que buen rollo David. Has hablado de vuestra historia en el blog?
Pues si te digo la verdad no me acuerdo....
ResponderEliminarLo miraré y si no algún día haré una entrada sobre un madrileño y una catalana jejejej.
Ella nació en Sabadell y vivió en Cerdanyola del Vallés, sus tíos y su abuela viven en Barcelona.
Haciendo memoria.... mi vida está llena de Catalanes, jejjeje.
Muchos besos
Esto merece un post David.
ResponderEliminarLos catalanes y tu. :)