Fiesta de Pijamas Masterchef
Es mi entrada 200 y en ella voy a
contar cómo hemos celebrado la fiesta de cumpleaños de Carla. El 8 de mayo
cumplió 7 añitos y así como hicimos el año pasado, su deseo era una fiesta de
pijamas con sus amiguitas.
El año pasado ya tuvo su primera
fiesta de pijamas y lo cierto es que fue fatal. Las niñas se lo pasaron bomba,
eso sí, pero Toni y yo no éramos conscientes a lo que íbamos. Lo cogimos con
mucho estrés y salimos diciendo “nunca más”. Las niñas revolucionadas no
dejaron de gritar emocionadas, subir y bajar escaleras a lo loco, tocarlo todo
sin control ni orden, la confianza es lo que tiene y Carla no hacía caso a nada
provocando así nuestra frustración al ser nuestra hija precisamente la que peor
se portaba. Todo y que organicemos una gimcana etc etc, fue duro controlar
tanta niña suelta desmelenada. Aquello fue peor que salir una noche de fiesta a
estas edades, me duró media semana la resaca.
Este año, al pedir fiesta de pijamas
de nuevo (atención, con cuatro niñas más) hice un reset y busqué la manera de
tenerlas el tiempo máximo entretenidas con alguna actividad no tan reactiva,
más suave, pero no por ello aburrida. Se me ocurrió hacer una fiesta temática,
así tendríamos un argumento en donde volcar las actividades. Buscando ese
argumento, di con esta genial idea: FIESTA MASTERCHEF. A Carla le encanta el
programa y cada semana lo vemos juntas. Es el único programa qué le dejo ver en
esos horarios y la dejo acostarse cuando acaba. De esta manera, haríamos un
concurso de cocina donde cada una debía elaborar su propia pizza para cenar.
Las invitadas debían traer dos cosas
indispensables para esta fiesta de pijamas: el saco de dormir y el rulo
aplanador para hacer la pizza. Este era el plan:
Fue tan chulo, quedó todo tan bien,
que ni me lo creo. Que gusto montar algo y que te salga a pedir de boca. De
hecho, me lo pasé súper bien. Mi idea no era la de aguantar el tirón, sino la
de pasármelo bien con ellas. Y así fue. Les preparé a cada una hasta un delantal blanco con su nombre en rojo, como los del programa.
Comenzaron a llegar a las 18:20 y triunfaron
unos dibujos para colorear que imprimí. Como no eran los típicos colores, sino
esos bolígrafos de colores muy variados, parece que les aburre menos. A mida
iban llegando, y hasta que llegaron todas, se entretuvieron muchísimo pintando.
Y cómo se detalla en el programa: hubo
photocall. Tanto antes como después. Las manualidades se me dan de pena, pero al final me quedó muy chulo
el marco que preparé para la ocasión. Era de cartón, con refuerzo de más
cartón. Luego lo cubrí con papel de regalo y lo forré con ironfix para que no
se rompiera. Saqué la idea de varios
videos que encontré en YouTube. Fue muy divertido.
Luego dimos paso al concurso, donde
algunas decidieron unirse por equipos y otras hacer su pizza de forma
individual. Cada una a su rollo jaja. Al final, resulta que lo difícil fue
acabar la pizza, porque todos los ingredientes se los iban comiendo. No llegó
ni una oliva al plato. El Bacon, el jamón dulce, el queso, el atún, los
trocitos de franfurts…todo se lo comieron a bocaos. Luego cuando las pizzas
estuvieron listas casi nadie tenía hambre. Pero como dice mi madre: no comer
por haber comido…..
Carla fue la encargada de dar el
veredicto y la pizza ganadora fue la de Maria i Beth. Aunque todas tuvieron su
diploma de participación, hubo acusaciones muy serias de tongo, porque claro, Maria es su mejor amiga y se le vio el plumero
a mi hija. El resto de participantes no estaban muy de acuerdo con la ganadora.
(Esto es la vida chicas, pensé) jajaja.
En acabar, dimos paso a la peli.
Finalmente no vimos “Coco” como teníamos previsto, prefirieron “Matilda” y oye,
otro acierto. Durante toda la película, estuvieron completamente entregadas. Algunas
la habían visto, pero la gran parte no. El rollito este de una profesora mala malísima
y una niña con poderes, las tuvo hora y
media de reloj, de lo más entretenidas y sin moverse del sofá. Algo insólito.
Recomendada para estas ocasiones.
Lo peor siempre viene a la hora de
dormir. Aquí hay subidón subidón. Y como
el año pasado, la peor es la mía. Como está en su casa, es su fiesta y somos
sus padres, pues nos torea. Ahora una chorradita, un pedete, una historieta,
unas risas…y no callan. Finalmente tuve que amenzarlas, claro.
-
Qui no calli, l’any vinent no ve. – (quien no se calle, el año que viene no viene)
Y se hizo el silencio……….es como
cuando de pronto calla el bebe llorón, que suspiras desde las entrañas y
sientes es un completo milagro.
Pues callaron y durmieron hasta el día
siguiente a las 8 de la mañana. Increíble ¿Ya están despiertas? Pero si los
días de cada día que a las 21:30-22:00 están dormidas, y les cuesta despertarse
para ir al cole….
Hora del desayuno. Toni fue a por los
churros mientras yo preparaba el chocolate. Riquísimos. Cuando acabamos, tocaba
operación “vestirse y recogida de sacos y mochilas” Eso mientras no paraban de
jugar, unas aquí, otras allí….pero la verdad que muy muy bien.
Me ha gustado muchísimo conocerlas
mejor. Vinieron niñas que nunca habían estado en casa, que prácticamente no
había hablado con ellas y me gustó mucho conocerlas mejor. Así como comprobar
la relación que existe entre ellas, como son más grandes, como se nota quien
tiene hermanas mayores y quien no, como son cada una….estoy tan acostumbrada a
las mías, que todo lo que no es Carla y Judit son mundos desconocidos. Y
disfruté mucho con ellas, de sus comentarios, sus puntazos, sus tonterías…
Una de ellas se proclamó la discjockey
del grupo y Ipad en mano, fue la encargada de poner música. Ahí conocí a los Adexe
& Nau………en fin, yo no recuerdo cuando empezó mi andadura con los New kids
On The block pero me recordó a eso. Que risa. Me dejaron ponerles alguna
cancioncita y se lo pasaron bomba con el video clip de “Voy a Pasármelo Bien” de
Hombres G.
Esta fiesta de pijamas fue perfecta. Muchas
anécdotas graciosas que guardamos y sobretodo, que ojala sea para todas ellas
(y en especial para la mía) de esas cosas que recuerdas con felicidad cuando te
haces mayor. Esa es la idea.
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