Adiós 2016

Muchos meses sin contar nada por aquí, sin entrar siquiera prácticamente, y en los que además han pasado las Navidades y hemos cerrado un año…todos los post que tengo empezados e inacabados me van a ayudar en ese resumen de lo ocurrido en estos últimos meses en los que he olvidado publicar. Se me pasaron las semanas y los meses sin demasiadas ganas ni tiempo libre disponible para ello y el poquito que he tenido me he enredado con otras cosas como dormir y descansar, ver series, y curarnos, la familia griposa al completo, de la gripe que hemos ido cogiendo uno tras otro.   

Empezaré por el trabajo pues nos ha ido fenomenal en el 2016 (Ya tocaba, aleluya). En general el año pasado fue muy buen año para como nos hemos visto en los últimos tiempos. Hemos empezado a exportar y lo cierto es que arrastrábamos unos ejercicios tan horribles, tan malos y traumáticos en este taller, que ha sido un regalazo. Las exportaciones han sido un apasionante mundo nuevo para mis jefes y para mí. Hasta la fecha, no había tocado nada de comercio exterior y me parecía un campo increíble por conocer. Consultas que crees no van a quedar en nada, sorprendentemente se materializan en pedidos y ahí empieza una aventura con nuevos retos a nivel profesional para un taller como nosotros. Hice un curso de Importación/Exportación la mar de majo donde he aprendido muchas cosas. Así que muy contenta por cerrar operaciones en Chile, en Arabia Saudí, en Isla Rèunion (que ni sabía existía francamente) y Argelia. Espero continúen las exportaciones porque realmente siento que es lo mejorcito que nos podría pasar, seguir por ahí.

En el terreno más personal, concretamente el de mami, me ha tocado sufrir un poquito con Carla. A tiempo pasado, creo que no ha sido para tanto en realidad, pero en esos momentos se te hace un mundo. Por distintos episodios vividos donde ves actitudes raras, desplantes feos y malas palabras hacia ella en un entorno donde no debería pasar, la he visto desplazada y la profesora me confirmó que en ocasiones es así, se queda sola. Decimos siempre que el sufrimiento es opcional, y seguramente es verdad, pero es difícil con los hijos poner un límite al dolor que sientes cuando ves estas cosas.

Quizás sea esa mezcla de timidez y excesiva seriedad que muestra en ocasiones que no le ayude a abrirse tranquilamente a los demás y hacerse con compañeros nuevos, porque fácilmente se puede confundir  con aparente arrogancia por su parte. También es una niña que se exige mucho a ella misma, y le gusta hacer las cosas perfectas y sufre demasiado si no le salen como ella quiere. Todo ello puede generar estas situaciones, nose.

Por otra parte, es bueno hacer auto criticas pero sin pasarse. Ella es responsable en muchos momentos en los que no sabe dejarse llevar y vencer su timidez, pero también existen conflictos que son cosas de niñas y que le ha tocado la peor parte. Exactamente me refiero a que si en un grupo de tres “amiguitas”, dos dejan de lado a una sola ¿quién tiene más puntos para sentirse abandonada y pasarlo mal? A la que dejan sola evidentemente. Pues esa es mi hija. Claro que sufre y se lo toma “demasiado a pecho”, pero es que es lo normal, no tiene todavía tanta fortaleza interior como para que no le afecte. Recuerdo estos hechos de cuando yo iba al colegio y ahora me pongo mala de pensar que empezamos con estas memeces típicas de la edad….pero bueno, POSITIVOS. Como digo, sin obsesiones y con bastante más objetividad que los primeros días, creo que es bueno para aprender y evolucionar. La vida es así y este tema tampoco es nuevo, como tampoco tan grave como yo pensaba inicialmente.
  
En el terreno familiar, han sido unos meses tristes. A finales de Octubre falleció mi tio con 65 años, el primero que nos deja de los 14 hermanos. Le detectaron varios canceres en febrero y le dieron pocos meses de vida, dos como mucho dijeron. Pues aguantó ocho como un campeón. Tenía una ilusión, volver al pueblo con todos sus hermanos, y ello había de ser en agosto, así que eso de morirse en dos meses no entraba en sus planes. Llegó a cumplir su último deseo…. Y yo lo viví con ellos también. Me emociono escribiéndolo.

Escribo sobre él y no me creo que ya no esté, la verdad. Mira que honestamente, no he tenido una relación intensa con él porque siempre he sido un poco pasota y muchas veces no soportaba esa conducta machista tan típica de estos hombres…..pero forma parte de los mejores recuerdos de mi vida, y le tengo ese cariño especial por ello. Aunque no tuviera feeling con él, era un buen hombre que amaba a su familia más que a nada, y que ha cuidado de mis primos siempre. Descansa en paz tito.   




Esta maravillosa foto es de una foto que hay en la casa del pueblo. Me quedo sin palabras observándola, es increíble. Solo puedo mirarla y adorarla. Familia de valientes, de supervivientes, familia unida siempre, a las duras y las maduras que de todo ha habido (y mucho), una gran familia en todos los sentidos....

Seguimos.

En noviembre llegó la esperada sentencia del juicio que tanto deseaba ganar. Guardaba esperanzas eh, por todas las cláusulas abusivas del peor contrato que existe en el mundo, que como me dijo un abogado eran “una aberración”, guardaba muchas esperanzas de ganar y desde junio esperaba la resolución del caso….pues lo he perdido. Sí. Maldita suerte la mía. Tenía que intentarlo, eso lo tenía clarísimo, lo intenté y salió mal. Bueno, regular. He ganado unos temas (suelo) y perdidos otros (los más gordos). Por esa razón no he pagado costas pero con lo que soñaba ganar, se ha esfumado. Necesitaba un juez valiente para que me diera la razón, uno de esos que se atrevieran a dar sentencias de las que se hacen eco los demás, de las que abren caminos, y ya me dijo mi abogado que habíamos caído con el peor. Ya tenía cara de cabrón ya….de esos que parece se están riendo de ti todo el rato con esa sonrisilla dejoputa mientras tú les cuentas tus penas.

Además, en estos días se habla muchísimo de estos casos: clausulas suelo, devolución de gastos de formalización de hipotecas…..y yo pierdo el mío. Que rabia de verdad, mi gafe en estos temas no tienen fin. Pero no quiero quedarme con lo malo porque la “batalla” continua y a veces, los resultados no son los esperados pero porque tu camino a seguir es otro y en ese momento, no lo ves. Bueno mira no lo sé jaja.

Vamos a las Navidades.

Han sido bonitas, mucho, pese a la tristeza de mi padre. Las niñas son más grandes y Carla las ha vivido entregada al máximo. Judit ya es más grandecita y también las ha disfrutado más activamente. Por ellas es que se viven de esta forma. Como algo diferente al resto de años, vamos a destacar que hemos celebrado en mi casa, ahora que tenemos espacio, algunas de las fechas navideñas: me vine a encargar yo de la Nochebuena y de la noche de Reyes.

La idea de la Nochebuena era la de descargar un poco a mi madre de faena y que a mí me hacía especial ilusión invitar a la familia. Soy una pésima cocinera, pero aprobé. Nunca haré la sopa como mi madre, de hecho, por más sal le echaba, siempre estaba “un pelín sosa”…¿sera posible? Puede que las gambas quedaran un poco secas porque las hice al horno (por comodidad evidentemente) y no es lo mismo que a la plancha, eso también es verdad, pero el tema del aperitivo me quedo muy muy muy bien, y no se vosotros que opináis, pero el picoteo es lo que más mola.

El exitazo aguardaba esperando a la noche de Reyes, y no por el roscón que lo tuve que tirar de duro que me quedó. No. Sino por lo bien que lo pasaron los niños. Lo celebramos en casa porque decidimos quedarnos en el  barrio a ver la cabalgata de allí y se apuntaron todos mis hermanos. Ciertamente, esta cabalgata es una birrieta. Es casera, pequeña y puede que cutre comparada con las grandes carrozas que vemos en las ciudades colindantes, algunas espectaculares y muy famosas….pero poder moverte por las calles con tranquilidad, que los niños corran cogiendo caramelos mientras se oyen los villancicos y canciones de toda la vida en catalán y castellano, que vengan los pajes a tu casa a entregar los regalos a una hora decente….eso lo prefiero a estar apegotonados en el  bullicio sin poder moverte, con los críos agobiados y tu histérica, para verles pasar deprisa y corriendo sin más. Cuando sean más grandes y tengan más paciencia, entonces. De momento, lo que mola es esto, recoger caramelos e ir tras ellos.


Y creo que lo voy a dejar aquí, porque está quedando un poco largo verdad? Y así voy pensando en los propósitos de año nuevo y esas cosas que todavía no los tengo muy claros, jiji



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