Grandes Mensajes
Sin duda existe una corriente feminista que está
haciendo muchísimo bien a las mujeres. Siempre ha existido la lucha, pero en
los últimos tiempos se ha avivado fuertemente. Quien no lo quiera apreciar es
porque quizás ha tenido la suerte de nacer en familias donde no ha existido una
educación patriarcal. O han tenido la suerte de crecer con grandes
oportunidades que las aleja de ciertas realidades. O quizás son personas con
gran autoestima que no han necesitado de estos mensajes para creer en ellas
mismas.
No ha sido mi caso.
Y esta lucha cala. Ayuda muchísimo a muchos
niveles: personales, sociales, profesionales. Como madre. Y como todo, cuando quiere ser entendido de forma constructiva, cala y
ayuda para bien. Doy las gracias a que por fin hayamos gritado y estemos
aprendiendo a valorarnos y a saber ponernos en nuestro lugar. A exigir igualdad y respeto
hacia nosotras mismas y a los demás.
Hubiera necesitado este tipo de educación y
esta energía hace muchos años. Ojala hubiera crecido con algunos de estos
principios básicos tan importantes para cualquiera, seas del sexo que seas. Con esta fuerza.
He cumplido 41 años y sé que nunca he creído en
mí, nunca fui valiente. Siempre vencieron los miedos y los enormes complejos ante
cualquier dificultad. Volvía a mi entorno seguro porque me invadía el sentimiento infinito de
inferioridad delante de quien fuera o de lo que sea. Mirando atrás, compruebo
que nunca he sido dada a grandes habilidades, ni físicas ni sociales. Es lo que
pasa cuando permaneces escondida, cuando ni tan siquiera lo intentas. Soy una persona muy sencilla que no sobresalgo especialmente en nada, salvo en
ser yo misma.
Pero es que como yo, no hay nadie más. Y cuando no he tenido miedo, ha sido un sueño.
Y llegados hasta aquí, ¿qué?
He aprendido a quererme mucho por ello, y me respeto absolutamente en todo.
Comentarios
Publicar un comentario